Marta Sánchez habla muy feliz y enamorada de su relación con Federico León

Marta Sánchez habla muy feliz y enamorada de su relación con Federico León: "bueno, yo no creo en las almas gemelas, yo creo en las almas, y cuando las almas están ya formaditas, y en un momento bueno, están aptas para tener esa unión con alguien. Pero quieras o no siempre somos diferentes en algo, lo único que hay que aceptarse y el yin y el yang es maravilloso". La cantante no descarta pasar por el altar en un futuro: "a mí lo que me gustaría es que me invitara a una fiesta con amigos y yo ir como novia, eso me gustaría mucho, pero no depende de mí, depende de él, él lo sabe". Destaca el buen momento personal y laboral que está viviendo: "estoy en un momento muy bueno, personal y laboralmente, y profesionalmente también. Tengo proyectos, que estoy ahí, yo siempre estoy inquieta, y siempre quiero hacer, hacer, hacer". Total Marta Sánchez: - Bueno, pues Marta, 16 años colaborando con la causa, ¿verdad? Se dice pronto, como tú bien has dicho. ¿Qué destacas? - Bueno, han sido unos años que se me han pasado volando, porque es una familia ya para mí, entonces me siento en un ambiente muy ya de amigos, de colaboración, y lo hacen tan bien, aparte que es que ya es como para mí es algo natural, ¿no? Venir cada año a la rueda de prensa y a la campaña de Ausonia, aparte les admiro muchísimo porque lo hacen con sentimiento, o sea, lo hacen realmente queriendo encontrar esa respuesta que esperamos todos, ¿no? - Estos 16 años, ¿cuál es el mayor avance que tú has vivido en esta lucha contra el cáncer? - Obviamente la investigación se está perfilando muchísimo con los años, ellos han dado mucho dinero a unos médicos que están siempre colaborando con ellos, y yo creo que es obvio que la gente cada vez se cura más, ¿no? Y hay muchísimo más porcentaje de mujeres que lo superan, con eso yo es con lo que me quedo, con que realmente están aportando ese granito de arena, porque no te digo que vayan a ser los héroes del mundo, pero quién sabe si a lo mejor canta de repente una noticia impresionante que surja porque Ausonia ha puesto su granito, ¿por qué no? Puede ser perfectamente, ¿no? - Una enfermedad que tú también has vivido muy de cerca, ¿verdad? En tu entorno familiar. - Sí, claro, todos sabéis que mi hermana falleció de esta enfermedad y que a mí también me dio un buen susto, aunque yo sigo ahí cuidándomelo y observándolo, pero vive dentro de mí, aunque es benigno. Pero sí, hemos sufrido en casa mucho por la muerte de mi hermana. Y eso nunca se olvida ni se supera. - Como dice Terelu, no hay que vivir con miedo, ¿no? ¿En tu caso? - Bueno, yo cada vez que voy a una revisión tengo mucho miedo. Voy con mi mejor amiga, Chiquinquirá, y las dos nos hacemos la revisión juntas. De hecho, lo tenemos en la agenda las dos. Siempre ponemos qué día te viene bien a ti. Que ir con una amiga mola. No es lo mismo que ir sola. - A raíz de esto entiendo que el cristal por donde se ve la vida cambia radicalmente, ¿verdad? Hay que darle prioridad a lo que la tiene, ¿no, Marta? - Bueno, yo siempre he dicho que soy una suertuda porque me podría haber tocado a mí en vez de a mi hermana, ¿no? Y le tocó a ella. Y soy yo la que estoy aquí y la que cuenta las historias de la vida. Pero sí que es verdad que no hay que vivir con miedo porque entonces no merece la pena estar siempre pensando, pues, a lo mejor, a lo mejor no. Hay que vivir con optimismo y pensar que con las revisiones y con la prevención precoz, pues, yo tengo muchas amigas que han tenido hace cinco años un cáncer de mamá y están estupendas. Por eso hay que ir a revisión. - El lema 'quiero verte envejecer'. ¿Esto hace que te olvides de esa arruga que a lo mejor antes estabas más pendiente de ella? Sabemos que eres una mujer muy... - Bueno, que no nos gusta envejecer es una gran verdad. No hay que disfrazarlo mucho. Aunque nos gusta disfrazarlo y buscarle razones al envejecer... Bueno, es obvio que es mejor cumplir años que no cumplirlos, pero a nadie nos gusta vernos mayores, obviamente. Y el que diga que bueno, hay gente que no le importará, pero a mí me encantaría que me importase menos, pero bueno, también tengo un trabajo que hace que me preocupe más. Bueno, sí, obviamente me gusta verme bien en los videoclips, en la tele, en las fotos, en los reportajes, en los eventos, pero a nadie le gusta eso, es así. - ¿Y tu estilo de vida cómo es? - ¿Mi estilo de vida? Me levanto pronto, me cuido mucho también en la alimentación, apenas salgo hace muchos años ya, no salgo casi, bebo solo champán, que es lo que me han dejado en la tolerancia de alimentos, el único alcohol que tolera mi cuerpo es el champán, un poco caro, pero bueno. Y voy mucho a Maribel Yébenes cuando puedo y - ¿Deporte? - Mínimo dos días a la semana, mínimo. Si hago menos me siento mal, estoy mal, mi cuerpo me protesta, psicológicamente también me siento peor. Hay que hacer ejercicio, la gente que no le guste, una vez me dijo una amiga que yo le decía jovencita, yo tenía pues treinta o así, yo 'qué horror, me espanta el ejercicio' y mi amiga me dijo 'algún día tendrás que empezar' y en algún momento de la vida siempre hay que empezar a hacer ejercicio. - ¿A la niña qué le dices, que no se espere a los treinta? - Ya le he dicho, hay veces que se mete en mis clases cuando viene el entrenador a casa algún día, pero está reacia todavía, pero algún día verá que lo que digo es verdad, que hay que empezar algún día. - Lo que está claro Marta es que te hemos en un buen momento laboral y personal, ¿verdad? Eso es indiscutible. - Pues sí, estoy en un momento muy bueno de actividad profesional y personalmente estoy encantada. Bueno, espera, voy a empezar otra vez. Estoy en un momento muy bueno, personal y laboralmente, y profesionalmente también. Tengo proyectos, que estoy ahí, yo siempre estoy inquieta, y siempre quiero hacer, hacer, hacer. No me gustan ni los domingos, casi, porque siempre me gusta hacer algo, y, bueno, aunque sea, ordeno cajones. Pero a mí, el acostarme por la noche y decir, ¿qué he hecho hoy? Y decir, tumbing nada más, no me gusta. - Y llegas a todo, ¿verdad? - Llego a todo, algún día peto, que son de esos días que necesito, por lo menos, dos horas de siesta, y me las duermo, y luego ya, otra vez, para adelante. - Y tú chico, ¿un santo, no? Paciencia. - Bueno, mi chico es casi como yo. Es hiperactivo, también. Sí, o sea, que en eso casamos muy bien. - Os retroalimentáis, entonces, ¿no? - Sí, sí, sí, él no para tan bien, es muy activo, le gusta mucho trabajar, le gusta mucho hacer, y hacer, y hacer, es un culo inquieto como yo. - Te apoya siempre mucho en todo, ¿verdad, Marta? - Sí, me apoya siempre, y me ayuda mucho. Me ayuda un montón en decidir cosas, yo a él también, como dice él, somos un buen equipo. - Sí, bien, no le conozco apenas, pero me acuerdo en una entrevista, vi cómo me llamó mucho la atención, hiperpendiente de ti. - ¿Sí? - Pero sin tú requerirle, como qué era de él que estaba. - No, él está pendiente porque es muy observador, pero luego también está muy al margen, dice, ella es la famosa, pero yo quiero ser anónimo. - ¿Piensas que es tu alma gemela, Marta? Después ya de cinco años que lleváis, creo. ¿Piensas que es tu alma gemela? - Bueno, yo no creo en las almas gemelas, yo creo en las almas, y cuando las almas están ya formaditas, y en un momento bueno, están aptas para tener esa unión con alguien. Pero quieras o no siempre somos diferentes en algo, lo único que hay que aceptarse y el Yin y el Yang es maravilloso. - ¿Y la boda para cuándo, Marta? - ¿Y el anillo para cuándo? El anillo para cuándo, no, porque ya lo tengo, me regaló uno, me ha regalado varios, pero uno es muy bonito. No, no lo llevo hoy, me lo podía haber puesto, mira por dónde, pero a mí lo que me gustaría es que me invitara a una fiesta con amigos y yo ir como novia, eso me gustaría mucho, pero no depende de mí, depende de él, él lo sabe. - ¿Cómo suegra cómo serías? - Como suegra, uy, mala, mala, mala, mucha caña daría, mucha caña daría, estaría todo el día corrigiendo fallos. - Cuando tu hija te venga con un novio o algo - Pues ya te digo, le miraría con lupa. No me gustaría que cometiese algún error que cometí yo, en plan - ¿Por ejemplo? - Bueno, pues que supiese muy bien lo que quiere y que fuese por eso, que no se distrajera en el camino. - Fuiste joven. - Sí, es verdad, es ley de vida. - ¿Cómo es ella? ¿Ella se parece mucho a ti? - A ver, yo he cometido errores, pero también he cometido grandes aciertos. Sí, sí, sí. Ella es muy, es un aleo, que sabe muy bien lo que quiere yo creo, pero que es muy cariñosa y muy de corazón, mi hija es súper tierna, es muy sensible y yo creo que, bueno, confío mucho en lo que haga, en su vida y respetaré siempre lo que elija, nunca me meteré en sus decisiones ni en sus parejas. Estoy un poco de broma. - ¿Estás muy encima de ella? - Sí. - ¿No te gustaría estar más para ella? - No, estoy encimita, sí. Pero porque creo que es lo que toca. Hay que cuidar a los hijos y decirles un poco cuando se equivocan, aunque nos hemos equivocado todos, pero esa es la labor de la madre. - ¿Y qué camino está cogiendo ella? ¿Va a seguir tus pasos o algo? - No, no, no. - ¿Qué es lo que le apasiona a ella? - Ella está haciendo una carrera en el IE, del Instituto Español de Diseño. Y bueno, yo creo que no tanto diseñar moda, pero sí más como gestionar cosas de moda. Ella tiene un don de gente, es muy bueno. Y tiene tres idiomas y yo creo que en algún sector del mercado encontrará su sitio. Pues Marta, muchas gracias por atendernos, por tu tiempo. Imágenes de Marta Sánchez en la presentación de la campaña de Ausonia.