Edmundo Arrocet más claro que nunca sobre sus demoledoras memorias

Ficha técnica


Fecha 17/11/2025
Parte 1
Duración 00:07:06
Sonido Totales
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Edmundo asegura que está preparando sus memorias: "sí, eso está hecho. Eso será más o menos creo que en febrero. Finales de febrero" el artista quiere aclarar cómo fue la relación con María Teresa Campos: "sí, sí, porque en el fondo se han dicho muchas cosas que no son, y yo quisiera aclarar y ver la parte correcta, que creo que por derecho me corresponde" Edmundo le manda un mensaje a Belén Rodríguez: "que cuente lo que pasó en Málaga. No le quisieron abrir la puerta" en cambio de la hija de Terelu no ha querido hablar: "de alejandrita no tengo nada que decir. A mí, Alejandra, yo la quiero mucho, porque era... Ella quería a sus tres nietos, pero ella tenía preferencia por ella, porque era la más chiquitita, y yo le cogí cariño hasta el día de hoy" El cómico no deja claro si está de nuevo enamorado: "hay que aprovechar a la edad de uno, que ya con 78 años, de que todavía se fijen en uno y uno la pase bien" Edmundo también nos habla de la muerte de Encarnita Polo: "encarnita, de verdad, cuando me lo contaron ayer no me lo voy a creer, no me lo voy a creer. Una persona tan querida, tan dulce, tan guapa y que de repente en la noche te encuentres con eso" Total Edmundo: - ¿Cómo estás hoy apoyando a Jesús, no? - Sí, claro, de todas maneras. De todas maneras hay que apoyarlo porque es un individuo, un amigo, pero que está en nuestras vidas, sobre todo los futbolistas, el deporte y todo eso, así que siempre con nosotros, sí. Pero que vive haciendo un referente para España aquí. Sí, de todas maneras, de todas maneras. Y me imagino que va a estar muy contento. Muy bien. La memoria estará muy buena. Vamos a comprar el libro ahora, porque como ha estado en tantos vaivenes, pues tiene que saber muchas cosas. - También queremos tus memorias, lo sabes. - Sí, eso está hecho. Eso será más o menos creo que en febrero. Finales de febrero. - ¿Está costando relatarlas, recordarlas, Edmundo? - Es difícil, sí. Es difícil porque son tantas cosas. ¿Cómo tú resumes seis años? Resumir seis años es muy difícil. Y nada más que hablar del tema nuestro, porque no se va a... Entonces ya serían muchos años. - Solo se va a hablar exclusivamente de la Gran María Teresa Campos. - Sí, sí, porque en el fondo se han dicho muchas cosas que no son, y yo quisiera aclarar y ver la parte correcta, que creo que por derecho me corresponde, o sea que por lo tanto... - ¿Vas a quitar caretas, Edmundo? - No, yo voy a decir la verdad. Además cuando tú dices la verdad se nota. Así que yo con eso voy a estar tranquilo. - consciente de lo bien que van a sentar las hermanas. - Eso... No, de ellas yo creo que hablaré como mucho dos páginas porque no tengo mucho que decir, pero sí, sí, sí. Yo personalmente con ellas no tengo nada. Cuando yo llegué de América, cuando llegué después de estar casi siete meses fuera, me encontré con un montón de revistas y entrevistas que salieron un montón de cosas que yo no... es que hasta el día de hoy no me entran en la cabeza. - En un plató de televisión por la tarde Belén Rodríguez seguía afirmando que si la dejaste a doña María Teresa Campos por un Whatsapp, Edmundo, siguen afirmando dicha teoría. - Ah, pues la teoría me parece muy buena. Me parece muy buena, pero que diga ella cuando un día fue a visitarnos a Marbella, qué es lo que pasó. - ¿Qué pasó con Belén Rodríguez? - Cuando fue Belén para allá. Ella te lo contará. - ¿Algo fuera de lo común? - No le quisieron abrir la puerta. - ¿A Belén Rodríguez no le quisieron abrir la puerta? - Sí. Y yo me cargué... ...abrir y me dijeron, no, tú no, no te preocupes. - Pero las propias hijas ni María Teresa querían abrirle la puerta. - No, no, de la hija no hablo, yo estoy hablando de María Teresa. Yo nunca voy a hablar cuestiones que no son de verdad, ¿vale? En eso yo estoy muy tranquilo, o sea que por lo tanto no voy a decir nada. Ella que diga ese día que ella llamó a la puerta, que iba con una amiga, y cuando yo le iba a abrir, le digo veces, no le abras. No sé, estarían enfadadas por algo, ¿no? Pero bueno, entre otras cosas. De Alejandrita no tengo nada que decir. A mí, Alejandra, yo la quiero mucho, porque era... Ella quería a sus tres nietos, pero ella tenía preferencia por ella, porque era la más chiquitita, y yo le cogí cariño hasta el día de hoy. O sea que, de verdad, no tengo nada que decir en contra de ella, para nada. Por lo tanto, no... - Lo de las visitas, Edmundo, como tú también has dicho, pero la parte de María Teresa te ha negado, que no había visitas por parte de las hijas. - No, pero eso es verdad, por eso se enojaron. Yo dije las veces... Y eso es lo que dije, por lo tanto... Eso lo mantienes, que las... De todas maneras, porque además mucha gente lo sabe, ella misma lo ha dicho, o sea, la propia María Teresa lo ha dicho, si quieres te dejo el programa, donde ella misma dice que no me vieron a ver, y yo le decía, oye pero Teresita, sí que nosotros estamos solos, estamos tranquilos aquí, ellas tienen que hacer, tienen que en su vida, también hay muy cuantos padres no ven a sus hijos, y cuántos hijos no ven a sus hijos, porque no quieran, es que los tiempos que corren son así, por lo tanto no, no, nada. - ¿Y si ellas no dan el paso de decirte, venga Edmundo, vamos a cumplir con la deuda que tenemos contigo, vas a tomar acciones legales, lo vas a demandar judicialmente? - Yo esperaba mucho tiempo, si eso viene, eso viene, yo esperaba mucho tiempo y ni siquiera... Ha venido eso, ¿no? Claro, y no, es que te digo que eso va, se aproxima, lo que pasa es que desde que pasó eso lo único que han hecho es hablar mal de mí y eso me duele mucho porque no me lo merezco, ¿no? Es que yo sé lo peor que le ha pasado en su vida, etcétera, etcétera. Hay intríngules como en todas partes, seis años, son seis años, mucho. Yo conozco matrimonios conocidos, famosos, amigos nuestros que han durado bueno, y medio, dos años, tres años, cuatro años, cinco años, y nosotros con nuestra edad, pues éramos muy felices, la pasábamos muy bien, por lo tanto, no, no, no, no. - Oye ¿cómo está tu corazón? ¿Sigue ocupado? - Mi corazón quiere latir sin ti. No, yo no soy latinlover, si es otra cosa que a mí me... No, no, yo no soy, si uno conoce gente y la gente te quiere y tú quieres a la gente, pues no pasa nada. - ¿Estás conociendo o enamorado? - Hay que aprovechar a la edad de uno, que ya con 78 años, de que todavía se fijen en uno y uno la pase bien, porque si no, no estarían con uno, ¿no? - ¿Con una amiga de paso o una amiga que se queda? - No, nunca se sabe, las cosas tú sabes que nunca se sabe, sí, sí, nunca se sabe eso. Bueno, los dejo, chicos. - La última encarnita. Encarnita Polo. - Encarnita, de verdad, cuando me lo contaron ayer no me lo voy a creer, no me lo voy a creer. Una persona tan querida, tan dulce, tan guapa y que de repente en la noche te encuentres con eso, porque un accidente, una caída, lo que... Vale, pero que pase eso, de verdad, que esos son... - ¿Cómo la vas a recordar tú, Edmundo? - Bueno, yo la recuerdo con mucho cariño, hacía mucho tiempo que yo no la veía, por lo menos unos nueve o diez años, ¿vale? Y yo la voy a recordar con esa sonrisa. Así que ella tenía, conocía yo a su marido también porque era gaucho argentino, entonces sí, claro, entonces nada, porque yo no tengo absolutamente nada que decir, todo lo contrario. - Están hablando un poco mal de la hija. - Ya, ya, ya empezamos ya. Mira, yo entiendo que la prensa, la televisión tiene que llenar espacios, pero de hacer sobres tan dramáticos y impresionantes es feo, es feo. Es feo. Y a pesar de mí, entonces, yo a mis hijos los veo súper poco. A mí es no. Yo a mis hijos los veo súper poco, porque uno está en Inglaterra, el otro está en Chile, el otro está... Me explico, ¿no? Entonces, no se puede. Y entonces, el día de mañana, éste no veía nunca a sus hijos. O le pueden decir a ese, éste nunca vio a su padre. Era más fácil que yo lo vea a ellos que ellos me vean a mí. Entonces, claro, pero no se puede decir eso. Yo encuentro que es muy feo, muy feo. Y menos decirle eso a la niña, pobrecita, que con el palo que se ha llevado, el que se le diga.

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