Ficha técnica
Almudena Cid se sincera con la prensa y cuenta lo feliz que está tras haber superado su ruptura con Christian Gálvez. Muy orgullosa de haberse recuperado de la etapa más dura de su vida, que no puede evitar recordar sin sentir lástima de sí misma: "qué lástima". Actualmente, se centra en reencontrarse y recuperar los valores que siempre le han caracterizado y habían pasado a un segundo plano: "está ordenándose todo muy bien, muy bien ordenado" "que en esos momentos no sabía ni dónde estaba y ahora ya (...), pero estoy muy bien" "sí, totalmente. Me he reencontrado, estoy encontrando rincones míos que no había transitado" "". Volver al deporte le ha ayudado a volver a ser la Almudena Cid que era: "estoy recuperando los valores que tengo yo, en esencia. De hecho, volver a mi etapa deportiva me ha ayudado mucho a recordarme como era yo". Descarta dar más detalles de su ruptura con Christian Gálvez, solamente hará público cómo ha conseguido superarla: "yo pienso en mí" "no, siempre hablaré de mi evolución propia, de mi autoconocimiento, de qué me ha ayudado, como he hecho siempre". Confiesa lo duros que han sido los últimos meses, en los que se vio obligada a trabajar a pesar de tener a la prensa tan presente en su vida: "mucho porque yo estaba trabajando, estaba subiéndome a un escenario todos los días y ha sido muy duro. Pero lo he hecho muy bien y me he dado cuenta de que tengo un sentimiento del compromiso muy alto". Almudena Cid confiesa su deseo de ser madre cuando llegue el momento y la persona adecuada: "no la descarto porque es algo que he tenido siempre en mente". Descarta que vaya a ser más exigente con las futuras parejas que tenga: "no, creo que voy a seguir siendo yo. Lo que pasa que la vida te ayuda a experimentar y te enseña muchas cosas". Sigue adelante con su vida, lejos del que fue su marido: "sí". Está orgullosa de haber cumplido el plazo que se propuso para recuperarse de la ruptura y asegura sentirse más feliz que nunca: "sí, dije: "seis meses". Pues seis meses" "en el diez. A veces estoy en un ocho, un siete. Voy ahí pero estoy bien". Respecto a las fotografías publicadas estando en la playa con su compañero Félix, asegura que se ha tomado ese tipo de noticias con mucho humor: "siempre. Me he reído muchas veces, lo tengo que decir. Me parece todo surrealista". Ahora, lo único que busca es ser ella misma y disfrutar de la libertad: "soy una tía súper normal, natural, espontánea. Es lo que quiero ser en mi vida, no quiero que nada me coarte mi libertad de ser como soy". Su sobrino marco es el amor de su vida, ahora mismo no piensa buscar ningún otro tipo de amor: "mi marco, más bonito. Tierno, puro". Almudena Cid confiesa su deseo de publicar para un público más adulto, aunque agradece que sus anteriores publicaciones sigan atrayendo a las más jóvenes: "siempre he escrito a un público infantil y me apetece hacer algo de adulto" "muy bien, un reencuentro muy bonito con las niñas de la gimnasia. Muy guay". Total Almudena Cid: - Buenas tardes, Almudena. - Hola. - Cuánto tiempo sin verte. - Ya. - Da miedo. - Tengo un monstruo en mis manos, ¿vale? No digo nada: un monstruo. - Protégete. ¿Qué tal? ¿Cómo ha ido esta feria? - Muy bien, un reencuentro muy bonito con las niñas de la gimnasia. Muy guay. - Te hemos visto con las niñas, iban con una cara de felicidad a ir a que les firmaras el libro y a la hora de charlar contigo. Se te veía muy entregada en esa tertulia. - Sí, porque las niñas vienen a absorber tus conocimientos o tu experiencia y ha sido precioso. Todos los años, con Olimpia y con el último libro. - ¿Qué te está dando esta literatura? - Muy bien. Son libros que ya saqué y que todavía están teniendo recorrido. Eso es muy bonito también. - Es un viaje a tu infancia, a tu yo interno, con los más peques de la casa, con los seres más vulnerables como son los niños. - Bueno, al final la escritura tiene que ver con mi vivencia, con lo que he querido ordenar de mi vida. - Que lo tienes ya todo muy bien ordenado. - Está ordenándose todo muy bien, muy bien ordenado. - Más fácil de lo que te imaginabas al principio. - Sí, dije: "seis meses". Pues seis meses. - Del cero al diez, ¿en qué momento podemos decir que estás? - En el diez. A veces estoy en un ocho, un sitie. Voy ahí pero estoy bien. - ¿en qué te refugias? - En nuevos proyectos televisivos. - ¿Te vamos a ver en televisión? - Estoy ahí que no sé qué va a pasar pero bueno. Barajando algunas posibilidades. Con la escritura, tengo intención de sacar otro libro, que me va a ayudar a mí mucho a ordenar mis cosas. - ¿Alguna biografía personal? - Es que todos los libros de Olimpia están basados en mi biografía, y también este libro de monstruos de Minuto y medio. Siempre he escrito a un público infantil y me apetece hacer algo de adulto. - Cuando este público infantil está tan presente en tu vida, ¿Descartas la maternidad? - No la descarto porque es algo que he tenido siempre en mente. - ¿Te gustaría? - Sí, si llegase el momento. - ¿A corto plazo? - Y la persona, claro. - No cerramos la puerta al amor. - No, bueno, ahora mismo estoy en mi. - Si estás de diez, que dice mucho de ti, yo te vi el primer día y estabas en menos cero. Me alegra. - Qué lástima. - Me alegra verte ahora así, en esta tesitura, con esa sonrisa y ese brillo en los ojos. No es tan incómodo como en otras ocasiones. - Yo entiendo vuestro trabajo y la verdad que luego iba a mi casa y decía: "madre mía, qué marrón esta gente". - Cuando me ha tocado preguntarte preguntas incómodas, te pido disculpas. - Sé que es vuestro trabajo y soy súper empática. Otra cosa no, pero me pongo mucho en el lugar de los demás. Te puedo decir que estoy mucho mejor. - ¿Estás feliz? - Que en esos momentos no sabía ni dónde estaba y ahora ya, es un poco absurdo porque voy con mi monstruo aquí, pero estoy muy bien. - Ya has pasado palabra por completo. - Sí, totalmente. Me he reencontrado, estoy encontrando rincones míos que no había transitado. - ¿Te gustan esos rincones? - Estoy volviendo como a valorarme. - Eso dice mucho. - Estoy recuperando los valores que tengo yo, en esencia. De hecho, volver a mi etapa deportiva me ha ayudado mucho a recordarme como era yo. - ¿Contarás algún día tu experiencia? Ha hablado todo el mundo, se han hecho hipótesis de barajes. ¿Contará Almudena Cid sus vivencias, lo que ha pasado? - No, siempre hablaré de mi evolución propia, de mi autoconocimiento, de qué me ha ayudado, como he hecho siempre. Si la gente ha seguido un poco mi carrera, siempre he hablado de. - ¿Te ha incomodado estar en el foco mediático? - Mucho porque yo estaba trabajando, estaba subiéndome a un escenario todos los días y ha sido muy duro. Pero lo he hecho muy bien y me he dado cuenta de que tengo un sentimiento del compromiso muy alto. - Muy profesional. - Sí, creo que estaba más elaborada de lo que creía y que lo he hecho muy bien. - ¿Te vas a hacer más exigente en el amor y al siguiente que venga le vas a poner los puntos sobre las íes? - No, creo que voy a seguir siendo yo. Lo que pasa que la vida te ayuda a experimentar y te enseña muchas cosas. Quiero volver a ser en esencia como era yo. - Seguro que lo va a conseguir. - Vale. - Le deseas toda la felicidad, eso sí, ¿no? - ¿cómo? - A Christian le deseamos toda la felicidad. - Yo pienso en mí. - Él que sea como pueda, si ha rehecho su vida y tú pensando en ti. - Sí. - No hay mal rollo, no hay nada y ya está. - - Casita nueva, eso sí. - Estoy alucinando con todo lo que ha salido. - ¿Te ha dolido mucho? - Bueno, creo que hay cosas que no son interesantes para la gente, pero vamos. - Han metido hasta a tu mamá. - Ya, la pobre mujer, que hace unas ensaladillas de la hostia, no ha entendido nada. - Habrá flipado la pobre. - Bueno, es una madre. - Que ha sufrido. - Una madre que ha visto todo y es una madre. No tengo la responsabilidad sobre ella porque ella es independiente, pero creo que mi coche está para allá. Madre mía, esto es como el día del muffin, me habéis pillado. - Una mamá que ha luchado por su hija y su felicidad. - ¿La cincuenta es para allá? Entonces es por allí. Esto es demasiado. - Tú estás tranquila, estás a gusto. ¿Te estoy incomodando? - No, no, si es que no tengo yo soy una tía súper normal, natural, espontánea. Es lo que quiero ser en mi vida, no quiero que nada me coarte mi libertad de ser como soy. Ya estoy hablando de más, pero bueno. - Me encanta que sea conmigo, con Europa Press. Entiendes a tu mamá porque lo ha sufrido en primera persona. - Es una madre, las madres saben por lo que pasan. - Y sufren. - Claro. - Te hemos visto en la playa, guapísima en Ibiza. ¿Te ha gustado verte en las revistas o no? - - Tenías un cuerpazo. - No me he visto en las revistas. - Pues tienes un cuerpazo, salías muy guapa. - Mira qué bien. - Con un amigo tuyo, con Félix creo que era. - Sí, son compañeros de la función. Eso también. Digo, madre mía. Estoy flipando. - Os habéis reído, ¿no? - Siempre. Me he reído muchas veces, lo tengo que decir. Me parece todo surrealista. - ¿qué es lo más surrealista? - No voy a hablar de surrealismos, ya. - Dicen que no hay verano sin beso. - Eso también me lo han dicho antes. Esa frase es la primera vez que la oigo. Estoy enamorada de mi sobrino Marco. - ¿Has visto el revuelo que ha habido en redes? El hombre de tu vida. - Me llama mi cuñada y me dice: Almu. No sé, es mi bebé. - Decían "Almudena Cid presenta al hombre de su vida" y era el bebé. - Mi Marco, más bonito. Tierno, puro. Dice que corte ya. - Si está encantada. - ¿No es un poco ridículo todo esto? - No. si llega este verano, llega. Y si no, llega en invierno. - Es que no estoy pendiente de eso, me importan más otras cosas ahora mismo. - Ese Monstruo, yo ya me he enamorado de él. disfruta, gracias por aguantar el tipo y mucha suerte. - Gracias. - Gracias. EUROPA PRESS NO SE HACE RESPONSABLE DE LOS ROSTROS DE LOS MENORES EN ESTAS IMÁGENES
Relacionados