Ficha técnica
Enrique Solís descarta que haya boda con Alejandra Domínguez en los próximos años: "pues ahora como he celebrado mi cumpleaños, de momento ni este año ni el que viene, ya me he quedado sin presupuesto, hay que esperar para el siguiente". Alejandra Domínguez confiesa que si le pidiese su mano, podría salir corriendo: "no sé cómo reaccionaría, lo mismo me da por salir corriendo, novia a la fuga, literal". Prefiere que la relación vaya poco a poco: "no lo sé, me da como ansiedad. Que vaya fluyendo poquito a poco, de forma natural porque si no, me da como no sé cómo puedo reaccionar. Sarampión". Enrique Solís bromea con que esperará a casarse cuando sus amigos se estén divorciando: "yo voy viendo que se me va casando el personal. A ver si engancho mi boda cuando se esté separando la siguiente generación". Aunque todavía no ha sido su cumpleaños, el empresario ya ha celebrado una gran fiesta con su círculo cercano: "muy divertida. Todos los amigos, jefes". Alejandra Domínguez confiesa no gustarle el nuevo trabajo de su novio por mantenerle mucho más tiempo ocupado: "tiene su trabajo, al cual está totalmente entregado, le apasiona. A mí no me encanta tanto su nuevo trabajo porque lo veo menos todavía". Le describe como una persona muy entregada al trabajo, diferente a su forma de ver su carrera profesional: "yo creo que él es incomparable a cualquiera, literal. Es un culo inquieto, abarca muchísimo" "necesita tener la mente ocupada, porque tiene una agilidad mental brutal. Yo, desde luego, soy más de descansar, series y sofá". Se confiesa una persona muy supersticiosa: "sí, totalmente. Creo en los amuletos, de hecho, me lo han preguntado hoy, y en el alma de las joyas. Aunque suene cursi, es cierto". Total Alejandra Domínguez y Enrique Solís: - Bueno, vais a ver la colección que presenta Rabat, Tres deseos. ¿Cómo os va la vida y qué tres deseos pedís? - E: la vida va bien, después de todo lo que hemos pasado. Venir a Barcelona a ver Barcelona lleno, ir a un evento, ver amigos y presentar una colección de Three Wishes es un verdadero placer acompañar a la familia. - Alejandra, ¿qué tres deseos pedirías? - A: eso no lo digo, si no, no se cumplen. Me los guardo para mí, tengo que rezar para que salgan muchas cosas muy bien. - ¿Eres supersticiosa? - A: Sí, totalmente. Creo en los amuletos, de hecho, me lo han preguntado hoy, y en el alma de las joyas. Aunque suene cursi, es cierto. - Hace poco estuvisteis en una boda, vais de boda en boda. ¿Cuál fue la última? - E: nos vamos dividiendo. Bodas, ahora vienen unas cuantas. Es temporada de bodas y más, post COVID. La última. - La de Jerez, de Alfonso. - E: entre bodas, que celebré mi cumpleaños. - Claro, el último fiestón ha sido tu cumpleaños. - A: la última boda fue su boda, el viernes pasado. - E: Vienen un par de bodas de amigos míos. Este sábado voy a Sevilla a una boda, vamos juntos y muy contentos. Deseos que no haya más pandemias ni más cosas nuevas d estas, que ya no me creo ninguna. Que estemos rodeados de amigos y familia y salud y trabajo, que es lo más importante. - Sé que él trabaja mucho, ¿Cómo trabaja tanto? ¿Es un adicto al trabajo o cómo va la cosa? - A: yo creo que él es incomparable a cualquiera, literal. Es un culo inquieto, abarca muchísimo. Tiene su trabajo, al cual está totalmente entregado, le apasiona. a mí no me encanta tanto su nuevo trabajo porque lo veo menos todavía. Además de sus propios negocios. Yo creo que no sabe estar sin hacer nada. Es verdad que cuando descansa, descansa. Necesita tener la mente ocupada, porque tiene una agilidad mental brutal. Yo, desde luego, soy más de descansar, series y sofá. - Hoy que tienen esos anillos tan bonitos, vosotros que vais de boda en boda. ¿Para cuándo la vuestra? - E: esa es la pregunta del millón. Pues ahora como he celebrado mi cumpleaños, de momento ni este año ni el que viene, ya me he quedado sin presupuesto, hay que esperar para el siguiente. - ¿Estáis tomando nota en la boda de vuestros amigos? - E: yo voy viendo que se me va casando el personal. A ver si engancho mi boda cuando se esté separando la siguiente generación. - Ahora que no nos oye, ¿tú eres romántica? ¿Te gustaría que hincara rodilla? - A: no sé cómo reaccionaría, lo mismo me da por salir corriendo, novia a la fuga, literal. No lo sé, me da como ansiedad. Que vaya fluyendo poquito a poco, de forma natural porque si no, me da como no sé cómo puedo reaccionar. Sarampión. - E: o que me lo pida ella. - A: una amiga nuestra se lo pidió ella a él. - E: bueno, pues nada. - ¿Qué tal la fiesta de cumpleaños? - E: muy divertida. Todos los amigos, jefes. - ¿Fue fiesta sorpresa? - E: no, la organicé yo. Como este sábado tengo boda en Sevilla, la adelanté. Muy contento, muy feliz. - ¿Y el deseo al soplar las velas? ¿O también eres supersticioso y no lo dices? - E: no soplé las velas porque yo no me encargué de nada, de mi tarta. - A: su cumpleaños todavía no ha sido. - E: yo lo habría soplado. - ¿Cuántos te caen? - E: treinta y dos. - Muy jovencitos. Todavía queda tiempo. Pasarlo bien. - E: Gracias por todo. - A: Gracias.
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