Ficha técnica
Yolanda Ramos confiesa estar disgustada por el trato que recibió de los periodistas cuando hizo público que sufría depresión: "no, no me gustó como lo utilizó por primera vez el periodista porque lo pusieron como titular 'no tomo pastillas' y parecía que hacía el amarillismo. Eso no me gustó mucho porque es algo muy íntimo en realidad". Asegura que nunca llegó a tocar fondo porque pidió ayuda antes de que eso pasara: "no, porque he sido muy de ir al médico antes, tocar fondo no". Confía en la ayuda psicológica y psiquiatra para superar las enfermedades mentales: "sí, la verdad es que sí porque me fio mucho de la psiquiatría y de la psicología tradicional". Lo hizo público para ayudar a concienciar a los adolescentes: "hay en juego muchas vidas, sobre todo los adolescentes. Esos eternos olvidados, y gente mayor, por supuesto". Agradece que su marido le acompañe al festival: "pf sí, la verdad es que me ayuda mucho y me gusta. También me gusta ir sola". Lo mejor de él es lo bien que le trata y asegura que la pasión sigue igual de encendida que siempre: "me trata muy bien, me siento muy deseada y me trata muy bien" "todo, todo". Confiesa que no pudo plantearse tener otro hijo por lo tardío que tuvo a su primera hija: "no, es que la tuve a los cuarenta y tres y ya no me daba tiempo". Bromea y asegura que no necesita más hijos, que ya cuenta con un gato: "¿de otro? No, tengo un gato maravilloso". Yolanda ramos bromea y asegura que está curtida en entregar premios pero le gustaría recibirlos alguna vez: "solo, recibir también, espero". Confiesa que tiene resaca de la fiesta del Festival de Málaga: "resaca de emociones y de todo lo demás". Total Yolanda Ramos: - ¿Sabes de quién vienes vestida hoy? - Miro la etiqueta, es Gustavo, un amigo mío, pero del apellido no me acuerdo. - Podrías nombrar a Antonella, que es la estilista. - Y a Gustavo, también. ¿Pero qué apellido? - Torín, Tari. - En la clausura, Yolanda, estás guapísima. - Gracias, vengo de un diseñador maravilloso, Gustavo Tari, y de Antonella, que es la estilista. Mira qué chulo. Como voy a dar un premio, quiero que tenga movimiento el vestido. - Hoy entregas un premio. - Sí. - Solo sabes entregar premios. - Solo, recibir también, espero. - ¿Qué tal? ¿Resaca de anoche? - Sí, totalmente. ¿Se me nota? - No, lo disimulas bien. - Resaca de emociones y de todo lo demás. - ¿Cómo lo pasasteis? - Muy bien, muy chulo. Aquí, en el festival, todo son alegrías. - ¿Te da pena cerrarlo? - Ay, sí, yo me quedaría muchos días más en Málaga. - ¿Has desconectado? - No, ni he desconectado. Es un sitio donde no descansas y no desconectas, es todo cine. - ¿Qué es lo más maravilloso que te ha pasado estos días? ¿Has ligado mucho? - ¿Qué si he ligado? Voy con mi marido. - Entonces no. - He mirado. - Has ojeado. - He ojeado a ver qué hay por ahí. Lo más maravilloso, lo de ayer de los Javis, fue maravilloso. Fue muy emocionante. - Te gusta compartir viajes y anécdotas con tu pareja. - Pf sí, la verdad es que me ayuda mucho y me gusta. También me gusta ir sola. - ¿Eres muy enamoradiza? - Mucho, mucho. - ¿Te gusta que te enamoren constantemente? - Sí. - ¿qué es lo mejor que tiene tu marido? - Me trata muy bien, me siento muy deseada y me trata muy bien. - Sigue la pasión y la fogosidad. - Todo, todo. - Os cuidáis mucho, os mimáis. - Sí, intentamos. Tenemos una hija en común, hacemos todo en equipo e intentamos, que eso es difícil. - Esa hija en común, ¿quedasteis en tener solo una? - No, es que la tuve a los cuarenta y tres y ya no me daba tiempo. - ¿Te ha quedado esa espinita? - ¿De otro? No, tengo un gato maravilloso. - ¿Quieres que la niña siga tus pasos? - Me da lo mismo, quiero que sea feliz. Se llama Charlot y es maravillosa. - Tiene una madre maravillosa. - Gracias, muchas gracias. - ¿Sabes lo que has ayudado cuando contaste lo de la depresión? - Ay, qué bien. Sabe contar la verdad. - ¿Por qué decidiste contarlo así? - Por ayudar a la gente que estaba, todo el mundo es maravilloso y todo el mundo no es maravilloso. Hay en juego muchas vidas, sobre todo los adolescentes. Esos eternos olvidados, y gente mayor, por supuesto. - ¿Te costó abrirte en canal y contar esa historia tan tabú? - No, no me gustó como lo utilizó por primera vez el periodista porque lo pusieron como titular 'no tomo pastillas' y parecía que hacía el amarillismo. Eso no me gustó mucho porque es algo muy íntimo en realidad. - ¿Te arrepientes de haberlo contado? - No, ahora ya lo digo abiertamente. Incluso, estoy contenta. - ¿Tu hija cómo reaccionó? - Mi hija no lee eso, no. Pero también la educaré en salud mental. - ¿Lo pasaste muy mal? ¿Llegaste a tocar fondo? - No, porque he sido muy de ir al médico antes, tocar fondo no. - Te pusiste en manos de especialistas. - Sí, la verdad es que sí porque me fio mucho de la psiquiatría y de la psicología tradicional. - Ole tú y ole tú. Gracias. - Gracias.
Relacionados