Ficha técnica
María Teresa Campos hace oídos sordos a las últimas declaraciones de Edmundo Arrocet sobre ella: "que no me interesa para nada". La presentadora agradece irónicamente las buenas palabras que ha tenido el cómico hacia ella: "gracias y que cualquier persona que me tiene afecto yo lo agradezco y, si es él, por supuesto". María Teresa confirma que sigue manteniendo el contacto con los hijos de bigote: "eso es verdad". La periodista ríe ante la insistencia de su ex pareja en desmentir que la dejó mediante un WhatsApp. Su hombre de confianza, Gustavo, asegura que puede demostrar que el humorista miente: "si quiere se lo demuestro yo. Que deje de mentir él". Este tema es en exclusiva. Total María Teresa Campos: - Hola, María Teresa, ¿qué tal? ¿Cómo estás? - Me pongo la mascarilla. - Te quería comentar nada más que está por aquí Edmundo, no te voy a decir nada malo. - Ay, por Dios. - Ha dicho cosas muy bonitas de ti. - Ah, qué bien - Ha dicho que eres una grandísima profesional y que te mereces seguir trabajando, que te sigue queriendo mucho todavía, que sus hijos siguen teniendo contacto contigo y te llaman por teléfono. - Eso es verdad, eso es verdad. - ¿Eso es verdad? Dice que él no tiene contacto con tus hijas y que no le importaría siempre cuando se diga la verdad. - Yo ya no te estoy oyendo. - Porque estamos hablando de Edmundo, ¿por eso no me oye? - ¿Qué? - Porque hablamos de Edmundo y por eso no me oye - No, no, que no me interesa para nada. - Ha dicho cosas bonitas por lo menos - Bueno, pues eso sí, muchas gracias. - Que te mereces seguir trabajando, que siempre has estado con los mejores trabajando, que has entrevistado a los mejores de España. - Pues nada, todo lo que es bueno muchas gracias. - No sé si eso significa que él tiene una conversación pendiente contigo y si tú estarías dispuesta. - Eso te lo estás inventando tú. - No, no me lo invento. Él sigue sosteniendo un poco que no te dejó por WhatsApp. - (Se ríe). - Él lo dice. - Ay - Es lo que sostiene. - Bueno, ya está, ya te he dedicado demasiado tiempo. - Dice que eso es una mentira infame - Ah, ¿sí? - Gustavo: Si quiere se lo demuestro yo. - Estábamos los dos presentes - Gustavo: Por eso. - Bueno, pues habrá que decírselo a él. - Gustavo: Que deje de mentir él. - Nada, nada, de todo lo bueno yo digo gracias. - Es lo que te quedas con ellos, ¿verdad? - Gracias y que cualquier persona que me tiene afecto yo lo agradezco y, si es él, por supuesto. Imágenes de María Teresa y Gustavo en un centro comercial. Este tema es en exclusiva
Relacionados