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Salvador Calvo dirige 'Adú' que pone el foco en la emigración en África

Ficha técnica


Fecha 17/01/2020
Parte 1
Duración 00:09:37
Sonido Totales
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Salvados Calvo llega con su nueva película ‘Adú’. El nuevo film que habla de una realidad que nos puede parecer lejana, cuenta la historia de dos niños que buscan un futuro mejor : “Yo creo que viendo la película tu puedes entender porque esas personas hacen ese viaje porque no les queda otra. Realmente nadie quiere dejar a su familia, a sus amigos porque sí, sino porque no les queda otro remedio porque si se quedan, van a morir. Entonces yo pretendo con esta historia que la gente entienda que no vienen pensando en robar si no que a lo mejor cuando alguno termina robando es porque no le queda otra. “Un mix de varias historias, eso es lo que encontramos en la producción. Calvo nos cuenta la otra historia que comparte pantalla con la principal: “Si, nosotros queríamos de alguna manera no estigmatizar África. Y creo que con todo esto de la emigración parece un sitio horrible y queríamos quitar ese estigma y contar la historia de dos europeos, padre e hija que necesitan de África para solucionar su problema, y van a África a reencontrarse como padre e hija. Nos servía como contraste para ver lo que son problemas como mundo occidental y lo que son problemas para esa gente del tercer mundo. Y por último la historia de unos guardias civiles, de aquellas personas que digamos que tienen la misión de que esos dos mundos permanezcan separados, y nos pareció interesante la reflexión que además, cuando hablas con ellos te cuentan”. El director habla de un nuevo proyecto que está nominado a los Goya: esta película cuando nosotros fuimos a buscar información sobre Melilla nos acompañaron la gente de CEAR y nos hicieron de guías. Y después de ese ‘favorazo’ que nos hicieron, nos contaron que estaban planteando una campaña a ver si nos podéis echar una mano, con el tema de las víctimas de las 'maras', de las pandillas. y hoy en día esas víctimas de las 'maras' no reciben ningún asilo por no provenir de ningún lugar de guerra a pesar de que las cifras son demoledoras. Hay 36 asesinatos al día y dijimos bueno, y ¿cómo os podemos ayudar? y como Alejandro y yo solo sabemos hacer cine, hicimos un corto y este corto está nominado a los Goya, así que esa fue nuestra aportación.” -Bueno yo creo que las dos comparten, en el caso de ‘Los últimos de Filipinas’, que yo aproveche el hecho real para mandar u mensaje antibelicista, en contra de cualquier guerra y que siempre creo que detrás se esconden motivos económicos. Y en esta película también está inspirada en hechos reales y tiene un mensaje que es: antes de juzgar como cifras a esas miles de personas que vienen a nuestro país hay que ponerles nombres y apellidos y entonces te das cuenta que no es tan fácil decirles que no pueden entrar. -¿ A dónde puede llegar esta película que no puedan llegar los informativos? -Pues ya te digo, yo creo que viendo la película tu puedes entender porque esas personas hacen ese viaje porque no les queda otra. Realmente nadie quiere dejar a su familia, a sus amigos porque sí, sino porque no les queda otro remedio porque si se quedan, van a morir. Entonces yo pretendo con esta historia que la gente entienda que no vienen pensando en robar si no que a lo mejor cuando alguno termina robando es porque no le queda otra. - Y la idea de esta película tengo entendido que ¿surgió de una historia o de varias? -La historia surgió mientras rodaba la primera película, yo estaba en Canarias entonces vino mi pareja y para no estar sin hacer nada se punto a una ONG, y allí todos los días llegaban gente de las pateras y se quedaban allí. Entonces una de las historias que me llamo la atención fue la historia de un niño de seis años que podía ser Adú. Este niño llegó con una supuesta madre y dos hermanas y luego se descubrió que no eran sus hermanas, ni su madre sino que lo traían para tráfico de órganos y que lo pensaban desguazar. -Hay otras dos historias más que quizás son más cercanas a nuestro mundo, digamos como europeos. -Si nosotros queríamos de alguna manera no estigmatizar África. Y creo que con todo esto de la emigración parece un sitio horrible y queríamos quitar ese estigma y contar la historia de dos europeos, padre e hija que necesitan de África para solucionar su problema, y van a África a reencontrarse como padre e hija. Nos servía como contraste para ver lo que son problemas como mundo occidental y lo que son problemas para esa gente del tercer mundo. Y por último la historia de unos guardias civiles, de aquellas personas que digamos que tienen la misión de que esos dos mundos permanezcan separados, y nos pareció interesante la reflexión que además, cuando hablas con ellos, te cuentan. - ¿De esta película ha salido otra?, como en el caso anterior. -Casualidades. Esta película cuando nosotros fuimos a buscar información sobre Melilla nos acompañaron la gente de CEAR y nos hicieron de guías. Y después de ese ‘favorazo’ que nos hicieron, nos contaron que estaban planteando una campaña a ver si nos podéis echar una mano, con el tema de las víctimas de las 'maras', de las pandillas. Y hoy en día esas víctimas de las 'maras' no reciben ningún asilo por no provenir de ningún lugar de guerra a pesar de que las cifras son demoledoras. Hay 36 asesinatos al día y dijimos bueno, y ¿cómo os podemos ayudar? y como Alejandro y yo solo sabemos hacer cine, hicimos un corto y este corto está nominado a los Goya, así que esa fue nuestra aportación.

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