Ficha técnica
Imagina que te quieres sacar un selfie. Tendrás que entrar en la aplicación de foto y pulsar el botón de darle la vuelta. Es un tipo de función que en ocasiones exige celeridad y resulta engorroso. Quizá, dependiendo del 'smartphone' que uses, hayas adjudicado un acceso directo a esta función aunque si no eres Kim Kardashian es poco probable.
Relacionados