Ficha técnica
Declaraciones de Marcos y Suceso, propietarios de dos negocios en la calle Máximo Agirre de Bilbao, que han explicado cómo han vivido el desalojo de sus locales este miércoles por un escape de gas tras romperse una tubería en unas obras. "Se me ha quedado impregnado el olor a gas", ha asegurado Marcos. "En cuanto hemos visto que la cosa era seria hemos cerrado, hemos sacado a los clientes, han cerrado la calle y a esperar a que pase todo, no queda otra", ha contado la otra entrevistada. "Ahora los bomberos están comprobando que en los sótanos y en los edificios no quede gas, entonces nos están avisando poco a poco para ir ventilando y, cuando esté listo, nos dejarán pasar para cerrar", ha añadido.
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