Ficha técnica
Los Mossos d'Esquadra desactivaron el domingo un punto de compra de móviles sustraídos en un piso del barrio del Raval de Barcelona, y detuvieron a tres hombres --uno de ellos menor--, según han explicado este jueves en un comunicado. Los agentes recibieron el aviso sobre las 19.30 horas, cuando les informaron de que tres jóvenes --que no se conocían entre ellas-- habían sido víctimas de tres presuntos hurtos de sus teléfonos móviles, y que mediante el localizador de los dispositivos les aparecía la misma ubicación. En ese momento, los agentes observaron a un hombre que entraba en el mismo portal en el que marcaba la localización de los teléfonos sustraídos y, tras identificarlo, lo registraron y localizaron cinco teléfonos de alta gama, tres de ellos envueltos en papel de aluminio en el interior de su ropa interior. El hombre dijo a los agentes que los había sustraído la noche anterior y que se dirigía a un piso donde acostumbraba a venderlos, momento en el que lo detuvieron e iniciaron una investigación. Con el consentimiento de la propietaria del piso accedieron al interior, identificaron a varias personas, y encontraron en una habitación un ordenador portátil y unos 70 móviles --la desaparición de una veintena de ellos ya había sido denunciada--. Ante los hechos, los agentes detuvieron a un hombre y a un menor de edad que vivían en el inmueble como presuntos autores de un delito de receptación, y los Mossos pidieron a la autoridad judicial una orden de entrada y registro del piso ante "la sospecha de que pudieran encontrar más dispositivos electrónicos". El pasado lunes realizaron el registro del piso y encontraron más de 50 teléfonos móviles sustraídos, y los dos detenidos pasaron a disposición judicial el miércoles y el juez decretó su libertad con cargos. El tercer detenido investigado por un delito de hurto quedó en libertad en dependencias policiales para declarar posteriormente ante el juez. (Fuente: Mossos d'Esquadra)
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