Manuel Martos desvela como se encuentra Raphael tras su regreso a los escenarios

Manuel Martos desvela como se encuentra su padre, Raphael, tras su esperado regreso a los escenarios: "Muy bien, muy bien, fantástico. Está feliz, pues eso, retomando su rutina, su vida, su profesión y lo que digo siempre, al final él ha nacido para seguir encima del escenario y que pueda volver después de lo que pasó, etcétera, y plenitud de facultades y disfrutándolo tanto, pues es lo más importante". El hijo del cantante asegura que su padre no estaba cansado durante el concierto y que lo disfrutó mucho: "no, no, bueno, hombre, pues como cuando uno juega un partido de fútbol, yo creo, al final es un desgaste físico, pero él está fantástico. Yo creo que él cuando se sube ahí es como que, no sé, es como otro, entrar en otra dimensión, ¿no?, para él. Y yo creo que hasta casi como que no pasa el tiempo. Y luego que el público lo lleva en volandas desde que pisa el escenario hasta que se va. Si fuera por ellos yo creo que podría estar ahí seis horas cantando, pero ellos saben que también hay que descansar. Con lo cual, bueno, yo creo que fue una comunión maravillosa, como siempre, ¿no?, entre mi padre y el público. Y nada, y ahora seguir, que es lo bonito". Explica que su madre no pudo asistir al concierto pero que sí estará presente en el de Madrid: "no ha podido venir, pero estará en Madrid, lógicamente. Y nada, pues eso, lo bueno es que hay muchos conciertos, muchas oportunidades para seguir viéndole". Total Manuel Martos: - Manuel, muy buenos días. Bueno, ¿qué tal? ¿Qué valoración hacéis de ese maravilloso concierto? - Bueno, pues una noche muy especial, emocionante, el público maravilloso como siempre y él, bueno, pues feliz haciendo lo que más le gusta. - ¿Cómo se encuentra él? ¿cómo se ha notado? - Muy bien, muy bien, fantástico. Está feliz, pues eso, retomando su rutina, su vida, su profesión y lo que digo siempre, al final él ha nacido para seguir encima del escenario y que pueda volver después de lo que pasó, etcétera, y plenitud de facultades y disfrutándolo tanto, pues es lo más importante. - Oye, pero más de dos horas de concierto. - Dos horas, dos horas. - Pero sin parar, ¿eh? - Sí, sí, sí, sí. - No sé si estaba un poquito cansadillo. - No, no, no, bueno, hombre, pues como cuando uno juega un partido de fútbol, yo creo, al final es un desgaste físico, pero él está fantástico. Yo creo que él cuando se sube ahí es como que, no sé, es como otro, entrar en otra dimensión, ¿no?, para él. Y yo creo que hasta casi como que no pasa el tiempo. Y luego que el público lo lleva en volandas desde que pisa el escenario hasta que se va. Si fuera por ellos yo creo que podría estar ahí seis horas cantando, pero ellos saben que también hay que descansar. Con lo cual, bueno, yo creo que fue una comunión maravillosa, como siempre, ¿no?, entre mi padre y el público. Y nada, y ahora seguir, que es lo bonito. - Para afrontar la gira. - Sí, claro. - Una gira enorme, ¿eh? - Sí, sí, sí, sí. Pero bueno, descansando y muy bien. Todo está bien dosificado. - Oye, hemos echado de menos a tu madre, esta vez no nos ha apuntado. - Bueno, no ha podido venir, pero estará en Madrid, lógicamente. Y nada, pues eso, lo bueno es que hay muchos conciertos, muchas oportunidades para seguir viéndole. Bueno, gracias, ¿eh? - Gracias - Hasta luego, gracias, chao. Imágenes de Manuel Martos atendiendo a la prensa y marchándose en coche.