Ficha técnica
Makoke está preparada para sentarse en un juicio contra Kiko Matamoros y zanjar el dilema de la casa: "Sí, claro. Todo llegará, ese momento tiene que llegar". Asegura que no tiene miedo de ver a su exmarido en el juzgado y confía plenamente en la justicia: "No, ninguno, no tengo ningún miedo" "Yo confío en la justicia, por supuesto que sí". Makoke responde a Kiko Matamoros y asegura que a ella tampoco le importa cómo le vaya a él en la vida: "Me parece muy bien, ya se nota. Es normal, a mí también me importa un carajo su vida". Rectifica y dice que no le desea ningún mal: "No, a mí me da igual. No le deseo ningún mal ni nada pero no me importa. Lo único que quiero es que sea feliz". Opina que Kiko Matamoros no podría decir en los medios de comunicación que ha mentido en el juzgado: "No, digo que no va a decir que ha mentido. 'acabo de estar en el juzgado y todo lo que he dicho es mentira'. Normal que no lo diga". Makoke asegura que será objetiva al ver a Kiko Matamoros en el reality y no será rencorosa por haberle vetado en el concurso: "No, no. Te juro que voy a ser una telespectadora y que le voy a juzgar con su concurso como al resto de concursantes". Imagina que verá el reality y le juzgará como al resto de concursantes: "Pues no lo sé, si me pilla en casa y eso, ¿por qué no?". Confiesa que no rechazaría participar en el reality como algo puntual, aunque tuviera que estar junto a Kiko Matamoros: "He dicho que no pongo reparos para trabajar en ningún sitio. Yo estaría, por supuesto no tengo miedo a nada ni tengo nada que esconder ni tengo nada de nada". Makoke mantiene que Kiko Matamoros no tiene razón y espera que la justicia acabe triunfando: "no voy a entrar, ya lo sabes, mi amor. No puedo, yo respeto la justicia y que nada. Si él dice eso, es normal que lo diga, no va a decir lo contrario, no va a decir que ha mentido". Total a Makoke: - ¿Qué tal hija? Estás coja. - Sigo con el pie. ¿Qué haces aquí a estas horas, a las doce de la noche? - Ahora vamos para casa. ¿Qué tal? ¿Cómo ha ido por la isla? - Fenomenal. De verdad, a estas horas, de verdad. - Hoy vienes guapa. - Vengo con el sombrero que no me pega nada con el plumífero. ¿Tú te crees, de verdad, que a las doce de la noche tenéis que estar aquí? Dime. - Sabes cómo es esto. - ¿Qué tal? ¿Has vuelto esta semana o no? - Sí. - Qué bien. Ya me has echado de menos. - Un poco. Que te iba a decir, ¿Sabes quién ha ido hoy al juzgado número uno de Pozuelo de Alarcón? - Claro que sí, Kiko. - ¿Qué te ha parecido? ¿Te han notificado algo? - Yo, de ese tema, no voy a hablar, ya lo sabes. - Te voy a decir lo que ha dicho ante las cámaras. - Sí, si lo he leído por las redes cuando estaba esperando para el avión. - Él está tranquilo, confía en la justicia aunque dice que poco, pero bueno, que confía porque tiene la razón y documentada. - Vale, vale. Pues nada, todo se verá. - ¿Apoyas ese 'yo tengo la razón documentada'? - No, no. - Porque no la tiene. - No voy a entrar, ya lo sabes, mi amor. No puedo, yo respeto la justicia y que nada. Si él dice eso, es normal que lo diga, no va a decir lo contrario, no va a decir que ha mentido. - Tú si dices que has mentido. - No, digo que no va a decir que ha mentido. 'Acabo de estar en el juzgado y todo lo que he dicho es mentira'. Normal que no lo diga. - Él ha dicho que le importa un carajo tu economía y cómo te vaya a ti. - Me parece muy bien, ya se nota. Es normal, a mí también me importa un carajo su vida. Cariño, de verdad, voy coja perdida. - A ti también te importa un carajo su vida. - No, a mí me da igual. No le deseo ningún mal ni nada pero no me importa. Lo único que quiero es que sea feliz. - Él sostiene que él está pagando la casa, que él también se quiere aprovechar de ese cierto modo. - Que sí, que sí. Tengo que llamar a mi cabi. - Otro día avísame y me llevas a casa. - Le deseas el bien, al menos. - Yo sí, todo fenomenal. - Y confías en la justicia. - Yo confío en la justicia, por supuesto que sí. - ¿Te ves sentándote con él en un juicio con un juez? - Sí, claro. Todo llegará, ese momento tiene que llegar. - ¿Te impone verle la cara? - Nada, en absoluto. - No le tienes miedo, no. - No, ninguno, no tengo ningún miedo. - ¿Irías a la isla de fantasma para verlo? Como te ha vetado. - Yo tengo que trabajar, no - ¿Tan mal está tu economía? Si vienes de Ibiza. - Pero hijo mío, que estoy coja perdida y tengo que llamar a mi coche. Espérate. - Si tienes dinero. - Yo tengo mucho, soy millonaria. - ¿Le vas a ver tirándose del helicóptero en los Cayos Cochinos o no? - Pues no lo sé, si me pilla en casa y eso, ¿por qué no? A mí Supervivientes es un reality que me gusta mucho. - ¿Le deseas que llegue bien a tierra, no? - Supongo que lo veré porque si no me pongo a verlo me lo van a poner así que - ¿Vas a ser objetiva o subjetiva? - Voy a ser súper objetiva con su concurso. - ¿Le vas a dar caña? - No, no. Si se lo merece sí, si no, no. - Como te ha vetado. - No, no. Te juro que voy a ser una telespectadora y que le voy a juzgar con su concurso como al resto de concursantes. - Si te mandaran como concursante del fantasma, ¿Estarías veinticuatro horas con él en el palacito? - He dicho que no pongo reparos para trabajar en ningún sitio. Yo estaría, por supuesto no tengo miedo a nada ni tengo nada que esconder ni tengo nada de nada. - Si pasarías una noche en el Palacito con él, por ejemplo. - Ala, vete. Yo te contesto todo en mi programa. - ¿Pero sí lo pasarías? - Hasta luego. - Adiós, Makoke.
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