Últimas imágenes de Tamara Gorro y Ezequiel Garay antes de anunciar su separación

Tamara Gorro reaparece en el concierto de Dani Martín acompañada por su marido y lo cierto es que nos ha hablado con total sinceridad sobre este momento tan delicado que está viviendo: "Estoy mal, antes era bien, bien. No saco ninguna conclusión porque no lo sé, no sé decirte qué pasa es como cuando te partes un pie y sin hacer la rehabilitación te imaginas el camino. Tengo un problema de salud mental que me he dado cuenta tarde porque no lo había identificado". En cuanto a qué rol está teniendo Ezequiel, la influencer nos confiesa que: "Yo me he aislado de todo el mundo, necesitaba hacerlo, el rol es como cualquier persona que está al lado de una persona enferma, estar. A las buenas, a las malas" y nos confirma que a sus hijos no les ha querido contar nada: "Antonio no, es muy chiquitín, Shaila está muy mimosa, me pregunta si estoy enfadada y hay veces que pienso que mi rostro tiene que cambiar. Notan que mamá se va más veces a trabajar y mamá no se va a trabajar. No les cuento nada, cuanto menos sepan y menos sufran, mejor". Tamara está luchando contra este bache emocional que está teniendo y por eso no sabe que Victoria Federica se ha convertido en toda una influencer: "Estoy al margen de todo, no veo, no estoy escribiendo y con mi terapia, medicación, mi familia". Eso sí, la comunicadora nos confiesa que está escribiendo un libro y que no quiere que nadie se piense que se va a retirar de redes, ya que todavía queda mucho gorro por dar: "Yo me sumergí en un libro que estoy escribiendo. Necesitaba hacerlo, sentirme libre y queda un largo camino. Tengo ganas, que voy a dar por saco que os vais a enterar". Total Tamara: - Cómo estás Tamara - Estamos, estamos - Que gusto verte - Estoy un poco venía diciéndole que uff, hay mucha gente. Estoy nerviosa eh, voy con ganas. Tenía nervios, muchas ganas de venir, pero no teníamos entradas, pero Ezequiel me dijo que era el momento. - Lo vais a pasar bien - Es la intención - Has pasado miedo, pensabas que ibas a tocar fondo - He tocado fondo - En qué momento te encontrabas para preocuparnos a todos - Mi intención no era preocupar, pero es que no podía... Tuve que hacer caso a los médicos - En qué momento estás - Estoy mal, antes era bien, bien. No saco ninguna conclusión porque no lo sé, no sé decirte qué pasa es como cuando te partes un pie y sin hacer la rehabilitación te imaginas el camino. Tengo un problema de salud mental que me he dado cuenta tarde porque no lo había identificado - Pero es importante decirlo - Yo creo que todo el mundo, si ahora nos paramos a preguntar, estamos muy mal por lo que hemos pasado, todo - Tu pareja que rol está haciendo en este proceso - Yo me he aislado de todo el mundo, necesitaba hacerlo, el rol es como cualquier persona que está al lado de una persona enferma, estar. A las buenas, a las malas - No hay tiempo - No hay tiempo, ayer por ejemplo tuve una terapia muy dura. La medicación empieza a hacer efecto, pero hoy me he levantado llorando y luego he dicho a la mierda ya. Yo que sé, esto es una basura - En estos momentos te das cuenta de la gente que está ahí y te apoya - Es tremendo, estoy muy sensible, sobre todo en redes sociales yo no me considero para nada influencer, soy una persona que decidí mostrarme tal cual - Te enfrentaste a la pérdida de un ser querido - Como todos, sí, yo me sumergí en un libro que estoy escribiendo. Necesitaba hacerlo, sentirme libre y queda un largo camino. Tengo ganas, que voy a dar por saco que os vais a enterar - Los peques qué te dicen - Antonio no, es muy chiquitín, Shaila está muy mimosa, me pregunta si estoy enfadada y hay veces que pienso que mi rostro tiene que cambiar. Notan que mamá se va más veces a trabajar y mamá no se va a trabajar. No les cuento nada, cuanto menos sepan y menos sufran, mejor - Hablamos de Victoria Federica, qué te parece - Estoy al margen de todo, no veo, no estoy escribiendo y con mi terapia, medicación, mi familia - Dice mucho que vengas al concierto - Ezequiel tenía mucho miedo el pobre, yo voy con mis píldoras de la felicidad y ya está, para llorar bastante tiempo hay. Gorro queda mucho, esto es un bache