Ficha técnica
María Teresa Campos sale a las puertas de su casa agarrada de la mano de una niña pequeña. Parece ser que la presentadora ha vuelto a sacar su lado más cercano y amable recordando así como eran sus paseos con sus hijas y nietos. La matriarca del clan Campos ha recibido una visita muy especial que le ha devuelto la sonrisa que al parecer se habría borrado de su rostro tras salir a la luz las confesiones de una chica que deja en entredicho que haya tenido una posible relación con Edmundo. Europa Press no se hace responsable de la difusión de imágenes de menores, hay que pixelarles el rostro. Este tema es en exclusiva
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